Hablar de Ricardo Gonzáles Vigil es sinónimo de hablar de literatura peruana. Un polifacético escritor que a lo largo de los años ha ido cimentando un gran reconocimiento dentro de las letras nacionales. Su amplia producción –la cual incluye poemarios, antologías y estudios críticos– ha sido el punto de encuentro de más de una generación de lectores ávidos por internarse en el universo literario del Perú. Y, prolífico como pocos, su pluma ha sabido mantenerse incólume a pesar del contexto tan adverso que nos ha tocado vivir desde inicios del año pasado.
Pues, ¡qué duda cabe! La pandemia por covid-19 ha marcado un antes y un después en la historia de la humanidad. La crisis sanitaria y económica ha desangrado a nuestro país, expuesto las debilidades estructurales del Estado y afectado negativamente la salud mental de la ciudadanía. Un escenario inesperado que requería de medidas urgentes, las cuales se basaron, fundamentalmente, en el expertise de los profesionales en materia de salud y economía. Y así, como parte de las acciones emprendidas por el gobierno, la política de confinamiento restringió la movilización a nivel nacional, afectando dramáticamente el ámbito laboral, psicológico y –por qué no– también cultural, a los que estábamos acostumbrados.
Sin embargo, ante un presente tan aciago, Ricardo Gonzáles Vigil se esfuerza por encontrar una esperanza, una “firme confianza en el triunfo, inevitable, de la vida”. El antologador peruano por excelencia reconoce que, al igual de importante que la investigación científica, la ficción literaria también debe ser considerada como una herramienta necesaria para comprender a cabalidad la crisis que hoy enfrentamos como humanidad. Razón por la cual, decide emprender una de sus más destacadas iniciativas: la congregación de 36 destacados escritores peruanos contemporáneos, cuya creatividad, reflexiones y/o vivencias han estado marcadas por la llegada del covid-19.
En ese sentido, Cuentos peruanos de la pandemia no tiene la intención de presentarse como una simple recopilación de cuentos, sino como un imponente –y muy bien cuidado– mosaico de ficciones que condensa la “heterogeneidad social y cultural” inherente de nuestro país. Gracias a la inclusión de una gran variedad de autores, pertenecientes a distintas generaciones y lugares de origen, Gonzáles Vigil le confiere a esta obra un carácter de pluralidad bastante enriquecedor. Las diversas perspectivas, estilos, enfoques y temáticas que van tejiéndose en el libro le otorgan al lector una aproximación a los temores, desventuras y cosmovisiones que se han ido afianzando dentro de la sociedad peruana actual.
Cabe señalar que, gracias a esta esmerada selección de escritores, la obra también puede ser considerada como una muestra bastante representativa de la narrativa contemporánea de nuestro país. La acertada presentación de cada uno de los autores junto a sus trabajos más destacados, antes de dar a inicio a la lectura del cuento, llega a transformarse en una suerte de mapeo general –muchas veces necesario– de la literatura nacional.
Aunque quizás, el mayor mérito del libro resida en su iniciativa de abordar por primera vez este acontecimiento histórico desde el ámbito estricto de la ficción. Al parecer, la propuesta de Gonzáles Vigil se desarrolla como una obra pionera dentro de las letras nacionales, nutriéndose –como toda buena literatura– del contexto bajo el cual se desenvuelven sus autores. En ese sentido, estoy seguro que Cuentos peruanos de la pandemia, con el paso de los años, terminará por convertirse en un referente para la narrativa peruana que se vea tentada de recurrir a la temática del covid-19.
Valoración: 4.0/5.0
Ficha técnica
Compilador: Ricardo Gonzáles Vigil | Título: Cuentos peruanos de la pandemia
Año de publicación: 2021| Editorial: Mascaypacha
Número de páginas: 488
Cátedra Libre 